Afecta
a 4,5 millones de trabajadores, que no cuentan con jubilación ni obra social.
El porcentaje más alto se da en Chaco, con 51,9%. Y el más bajo en Tierra del
Fuego con 12,8%, según el INDEC
Construcción.
Un sector con elevado empleo no registrado. /MARIA E CERUTTI
Tomando las
localidades del interior de las provincias, el trabajo “en negro” en todo el
país alcanza al 37,2% de los asalariados, de acuerdo con las últimas
cifras que publicó el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC). Y se
mantiene casi sin variantes en los últimos tres años, desde que
el organismo estadístico comenzó a realizar estas mediciones.
Si se analiza el mapa
nacional del empleo en negro, se advierte que Chaco encabeza el ranking con
un 51,9% de trabajo informal. Y Tierra del Fuego ocupa el último lugar con
el menor porcentaje: 12,8% del total de asalariados.
Así, la estadística
oficial admite que sobre 12 millones de asalariados, casi 4,5 millones son
trabajadores en negro. Esto implica que no gozan de descuentos jubilatorios
y tampoco tienen acceso a una obra social y otros beneficios laborales o
sociales.
Además, este fenómeno afecta
principalmente al empleo femenino: entre las mujeres alcanza al 40,4% y
entre los varones al 34,8% de los trabajadores.
Si a estos 4,5
millones de afectados se suma el 1,3 millón de desocupados, se obtiene como
conclusión que el 47% de los asalariados tienen problemas de empleo, ya
sea por no tener trabajo o por no estar registrado.
Los datos, que se
compilan una vez por año, corresponden al tercer trimestre de 2012. La medición
arrancó en 2010 con un 37,8% de empleo en negro, bajó al 36,1% en 2011 y subió
al 37,2% en 2012.
En esas tres
mediciones, el trabajo femenino tuvo mayores índices de empleo en negro. En
parte es por la incidencia del personal doméstico, uno de los sectores con
mayor informalidad, junto con la construcción. En este rubro Chaco también
encabeza el ranking con el 51,9% de empleo femenino no registrado.
La novedad de esta
nueva medición es que a los 31 aglomerados de la Encuesta Permanente de Hogares
(EPH), se agrega la realidad laboral del interior de las provincias, donde el
empleo en negro es mayor que en las principales ciudades.
Por ejemplo, en el
aglomerado Gran Resistencia –que es el que figura en la EPH y abarca a la
capital de Chaco- el empleo en negro es del 39,9%. Pero en el interior trepa
al 61,1%. Al promediar ambos valores, Chaco registra un empleo en negro del
51,9%. En casi todas las provincias, el interior registra un mayor empleo en
negro que en las capitales o principales ciudades.
Se estima que al
incluir al interior de las provincias, el empleo no registrado se eleva casi
2 puntos con relación a la medición de los 31 aglomerados. Eso daría para
el primer trimestre de 2013 un empleo en negro de casi el 34% que se explicaría
por el avance del empleo estatal. Si se excluye el empleo estatal- que abarca a
casi el 25% de los asalariados- el empleo en negro en el sector privado
trepa a casi el 50%. Por ejemplo, en Santa Cruz el empleo no registrado es
bajo -16,4%- pero el 48% de los trabajadores dependientes de esa provincia
trabaja en el Estado.
El empleo “sin
descuento jubilatorio” es el más evidente de los trabajados precarizados. Pero
existen otras formas de trabajo en las que los trabajadores no tienen plenos
derechos, como los trabajos por contrato, muy extendido en el sector
público y que avanzó muchísimo en los últimos años. También el de los “factureros”,
que son empleados que se desempeñan en forma regular bajo el régimen del
Monotributo, haciendo su propio aporte previsional.
Publicado en: www.clarin.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario